¿Ayuda el cannabis medicinal a la Enfermedad de Parkinson?

0
2893
Pareja mayor oliendo una planta de cannabis

Muchas personas han oído hablar sobre la enfermedad de Parkinson, pero pocas saben verdaderamente en qué consiste. Esta condición incapacitante puede provocar problemas graves en el funcionamiento diario de la persona que lo padece, debido al gran daño cerebral que provoca.

El Parkinson lleva muchos años suponiendo un problema sin solucionar para la neurología, la psiquiatría y la psicología, pero recientemente el cannabis medicinal ha mostrado efectos prometedores. ¿Podría suponer la planta una esperanza para los pacientes con esta enfermedad?

 

En qué consiste el Parkinson

Las investigaciones sugieren que el cannabis podría ser beneficioso para sobrellevar los síntomas y ralentizar la progresión de la enfermedad de Parkinson, un trastorno neurodegenerativo del sistema nervioso. Afectando a más de 10 millones de personas en el mundo, el Parkinson causa el malfuncionamiento y la posterior muerte de células en el cerebro.

Esta enfermedad afecta principalmente a las neuronas dopaminérgicas responsables del control del movimiento, de ahí los problemas que conlleva. Los núcleos de neuronas de la Sustancia Negra (estructura del mesencéfalo), tienen la función de producir dopamina, la cual ha de llegar hasta los Ganglios Basales, zonas del cerebro muy implicadas en la realización del movimiento. Durante la enfermedad de Parkinson, los núcleos dopaminérgicos de la Sustancia Negra dejan progresivamente de producir el neurotransmisor, lo cual impide que los Ganglios Basales reciban señales y afecten de esta manera al movimiento.

Los síntomas comúnmente asociados al Parkinson incluyen temblores, ralentización del movimiento, rigidez e inestabilidad en la postura. La enfermedad también puede derivar en depresión, problemas cognitivos, insomnio, fatiga, problemas para tragar y dolor. Y algunas veces la psicosis, un deterioro de las funciones del pensamiento y la emoción que provoca la pérdida de contacto con la realidad, también puede ocurrir.

No existe en la actualidad ninguna cura para la enfermedad de Parkinson, y el tratamiento se centra en ayudar en el control de los síntomas. Los medicamentos pueden aumentar la liberación de dopamina o imitar su acción, ayudando a los problemas de movimiento, temblor y caminar. En algunos casos, la cirugía intracraneal puede ser requerida para regular ciertas áreas del cerebro.

Cannabis y Parkinson

Sorprendentemente, los doctores del siglo XIX ya prescribían tinturas de cannabis a los pacientes de Parkinson, las cuales ayudaban efectivamente a calmar sus temblores. A día de hoy, varias investigaciones científicas han indagado en el asunto, mostrando resultados muy interesantes sobre los efectos del cannabis en el Parkinson.

En 2014, investigadores de la Universidad Tel Aviv intentaron arrojar luz sobre el conflicto que el asunto había generado en torno al Parkinson. De esta forma, trataron a 22 pacientes con un trastorno clínico motor a través de fumar cannabis, en un estudio observacional. Lo que hicieron fue analizarlos antes de consumir la planta, para tener una idea de su rendimiento motor base, y tras 30 minutos del tratamiento con cannabis volvieron a observarlos.

El equipo midió los resultados de acuerdo con la Unified Parkinson Disease Rating Scale. La escala tomaba una amplia variedad de factores en consideración como:

  • Evaluación del comportamiento, humor y actividades mentales
  • Evaluación del discurso, la escritura, la vestimenta, higiene y otras actividades diarias
  • Habilidades motoras
  • Gravedad del Parkinson
  • Complicaciones de la terapia

El dolor y la calidad del sueño fueron también evaluados. Después del uso del cannabis, los pacientes mejoraron significativamente en sus habilidades motoras y los síntomas de temblor, rigidez y ralentización del movimiento también se redujeron. Además, los pacientes mostraron mejoras en las escalas del sueño y el dolor.

 

El Sistema Endocannabinoide y el Parkinson

Existe bastante evidencia empírica de que el Sistema Endocannabinoide (SEC) puede jugar un papel importante en el desarrollo de la enfermedad de Parkinson.

El SEC es un gran sistema de células receptoras a las que los compuestos del cannabis, los cannabinoides, se dirigen cuando es consumido, causando gran cantidad de efectos. El sistema endocannabinoide regula una gran multitud de funciones, desde nuestro sistema inmune y la movilidad, al apetito, el sueño y la memoria.

En 2010, en una revisión a los estudios llevados a cabo sobre el Parkinson, los investigadores confirmaron que el SEC era afectado a medida que las células de dopamina morían. La dopamina se segrega cerca de la zona central del cerebro y, sorprendentemente, hay ubicados grandes concentraciones de receptores para endocannabinoides en los Ganglios Basales.

Los receptores CB1 son los más abundantes en esta región, aquellos a los que el compuesto psicoactivo de la marihuana, el THC, se dirige. Por otro lado, nuestro cuerpo también produce compuestos químicos naturales que se acoplan a estos receptores, los denominados endocannabinoides. En el año 2000, varios investigadores encontraron que el nivel de estos químicos se elevaba a grandes niveles en aquellos sin la capacidad para mover los músculos. Estos descubrimientos presentaban evidencia de que un tratamiento efectivo contra el Parkinson estaría ligado, de alguna manera, al sistema endocannabinoide.

La idea fue apoyada en un estudio de 2011, publicado por científicos españoles de la Universidad Complutense de Madrid. Los autores probaron los efectos del THC en ratas que padecían un trastorno motor similar al Parkinson, ofreciendo resultados prometedores.

Además, en 1998, otra investigación sugirió que tanto el THC como el no psicoactivo cannabidiol (CBD) podían tener funciones neuroprotectoras. Ambos tenían la capacidad de actuar como antioxidantes, protegiendo a las neuronas del daño y revitalizando aquellas ya lesionadas o deterioradas. Estas propiedades implicarían que los cannabinoides podrían ralentizar la progresión de la enfermedad.

 

Aún queda mucho por investigar

Sin lugar a dudas todos los estudios y resultados citados hasta el momento son prometedores, pero aún queda un largo trayecto para asegurar que el cannabis medicinal pueda suponer una posible cura para el Parkinson. Lo que sí podemos confirmar es que la relación entre los cannabinoides y la enfermedad es más estrecha de lo que en un principio se pensaba, y la planta ha probado ser efectiva para ayudar a calmar los síntomas y mejorar la vida de sus pacientes.

 

La información presentada en este artículo está dirigida a fines útiles e informativos. No debe usarse ni como recomendación ni tratamiento médico.